LAS CALLES DE LA CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS  AIRES FUERON NOMBRADAS, EXPANDIENDOSE DESDE EL RÍO DE LA PLATA HACIA EL INTERIOR, CON PERSONAJES, LUGARES Y ACONTECIMIENTOS HISTÓRICOS.

En el año 1536 Don Pedro de Mendoza funda la ciudad, habiendo desembarcado en el barrio de La Boca. Se dice que uno de los primeros inmigrantes que pisó sobre estas tierras, alrededor del año 1587, dijo: “que buenos aires son los de este suelo”,..

Siguiendo sus tradiciones, se construyen distintas iglesias y capillas entre los años 1733 y 1769. De esa forma y debido a la costumbre de los habitantes, se comienzan a formar pueblos alrededor de cada una de estas iglesias: La Catedral, San Nicolás, El Socorro, Montserrat, La Piedad y La Concepción. Estas parroquias pertenecen a algunos de los barrios más antiguos de la ciudad como San Nicolás, San Telmo, Monserrat y Retiro. Esto es de importancia considerable ya que estos lugares de la ciudad fueron los primeros asentamientos y por ende, donde ocurrieron los primeros acontecimientos que construyeron la historia de la ciudad.

A principios del siglo XVIII, El actual barrio de Barracas lleva su nombre debido a las estructuras que cumplian la función de almacenar cueros y distintos productos para su posterior embarcación. Con la ley de federalización, por otro lado, se nombra al barrio de Nueva Pompeya en 1900, aludiendo a la capilla de la Virgen del Rosario, respetando la antigua tradición.

A fines del siglo XVIII, entre 1780 1800,  y los nuevos integrantes de la ciudad, buscando un sustento, vieron la posibilidad de instalarse hacia el sur, ya que por el puerto de aquel entonces era factible vivir del comercio de las mercaderías, legal o ilegalmente. La ciudad estaba creciendo en población y comerciar alimentos era negocio para una ciudad en auge.

Las calles de la ciudad de Buenos Aires empiezan a tener vida. En 1810, se produjo la Revolución de Mayo, acontecimiento que dio el nombre a la calle 25 de Mayo, en Montserrat. En 1816 se declarà en el Congreso de Tucumàn la independencia del virreinato con respecto a España. Una actual avenida que nace en San Telmo lleva el nombre en honor a dicho suceso..En 1819 se proclamó la Constitución y un barrio, el espacio donde transitaban las carretas cargadas con mercaderías y donde había un gran mercado,  se llamó de esa forma. En 1908; Maipu, Reconquista, Defensa (1849) son algunos ejemplos de las calles que fueron nombradas a partir de batallas en defensa, justamente, del pueblo de la ciudad. Por otro lado, en el año 1822, hubo también una transformación en la nomenclatura de algunas calles aludiendo a batallas, regiones y países limítrofes que formaban parte del Virreinato.

Entre 1895 y 1914 hubo una corriente migratoria. A fines de la década de 1850, estas corrientes migratorias eran notables. Los barrios de Almagro, Boedo, Barracas, Nueva Pompeya y principalmente La Boca,  comenzaron a recibir grandes conglomerados de ciudadanos italianos y españoles, más que nada. Pero también griegos, franceses y sajones. Este fenómeno instaló nuevas costumbres y hábitos en la ciudad: en la construcción, en las comidas, en el lenguaje, etc. Los inmigrantes, junto con su capital ayudaron a crear los ferrocarriles, los tranvías, la instalación de gas e innovaciones portuarias.

El barrio de Almagro debe su nombre a Julián Almagro desde 1857. Un propietario de tierras en la zona que donó sus terrenos para que se construyera la primer estación de tren. El barrio de Boedo y la avenida que transita por este barrio también, hacen honor al Dr. Mariano Joaquín Boedo desde 1882. Hoy en día, ambos barrios tienen una tradición muy fuerte relacionada con el tango y con los típicos cafés, producto de la mezcla cultural de las corrientes migratorias que hacen a la ciudad de Buenos Aires.  

Hacia 1910 la ciudad era una de las principales y más importantes de América, por ende, se necesitaba un puerto que sea acorde al caudal de mercaderías y productos a comerciar. Roca envio a construir dieciséis docks de ladrillos rojos entre 1884 y 1905. Décadas más tarde, durante la época menemista, se comenzó el segundo plan de urbanización que dio lugar a la apertura de numerosas calles, bulevares y avenidas que fueron nombradas posteriormente con nombres de mujeres latinoamericanas de reconocida trayectoria en un contexto en donde la mujer había empezado a tomar relativa independencia del hombre.

Una síntesis para comprender y darle un marco teórico a la investigación a presentar, llegando a la conclusión por medio de ejemplos que responden directamente a la construcción de la ciudad de Buenos Aires, a sus calles y sus barrios, en una sucesión temporal de acontecimientos, reconocimientos y personajes históricos, desde su fundación en las cercanías del desembarco de Pedro de Mendoza, hacia el interior de la provincia.